Se considera una alternativa para aliviar el dolor
Utilizar sonidos de instrumentos no convencionales o frecuencias de sonido específicas para fomentar el bienestar es lo que busca la terapia de sonido, un tratamiento no invasivo que se está convirtiendo en tendencia.
Esta técnica se puede llevar a cabo de diversas formas, por ejemplo la meditación con cuencos tibetanos, la musicoterapia, la terapia de sonido con diapasones y otros instrumentos musicales.
De acuerdo con Oscar Cordero, especialista en sonoterapia, ciertas regiones del cerebro responden a diferentes sonidos y propiedades, las vibraciones viajan a través del oído y se transforman en impulsos nerviosos, que son interpretados por la corteza auditiva, o el centro auditivo del cerebro, y reaccionan de manera diferente en cada región.
Los beneficios pueden variar según la persona y la sensibilidad a las vibraciones sonoras:
- Mayor relajación
- Ayuda a la concentración
- Estados meditativos más accesibles
- Reducción o alivio del dolor físico
- Reducción del estrés
- Aumento de los niveles de energía
“Debido a que las vibraciones del sonido afectan profundamente al cerebro, los patrones de ondas cerebrales a menudo cambian para coincidir con aspectos de las vibraciones del sonido, incluyendo tonos y secuencias de tonos. El cerebro refleja el sonido: cuando la secuencia de tonos se vuelve coherente y suena como una melodía, partes del cerebro interactúan de manera más coherente. Los sonidos que promueven la calma, como los cuencos de metal, han demostrado afectar a las ondas cerebrales delta, que están asociadas con la relajación profunda”, expresó Cordero.