Modere su dieta durante las fiestas de fin de año

Las espinacas contribuyen a la digestión

 Llegan las últimas semanas del año y la agenda se empieza a llenar de eventos con la familia y amigos, lo que significa comer un poco más de lo habitual.

El aumento de peso durante estas celebraciones podría sostenerse en el tiempo, si el peso corporal continúa aumentando, el impacto en la salud podría ser negativo, pudiendo llegar a afectar otros aspectos como la presión arterial, los niveles de azúcar en sangre y el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Nataniel Viuniski, médico especialista en nutrición y miembro del Consejo Consultor de Nutrición de Herbalife, recomienda ser conscientes a la hora de elegir la comida y optar por alimentos que promuevan la salud a largo plazo, por ejemplo:

  1. Frutas frescas: son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes. Ayudan a apoyar la salud digestiva, controlar el apetito y mantener un sistema inmunológico fuerte.
  2. Verduras de hojas verdes: espinacas, acelgas y rúcula son fuentes excelentes de fibra y micronutrientes que contribuyen a la salud digestiva y equilibran comidas más pesadas. Además, aportan pocas calorías y mucha saciedad.
  3. Frutos secos (nueces, almendras, avellanas): ricos en grasas saludables y proteínas. Consumidos con moderación, ayudan a mantener la saciedad por más tiempo y son beneficiosos para la salud cardiovascular.
  4. Pescados grasos (salmón, atún): contienen ácidos grasos omega-3, esenciales para la salud del corazón y del cerebro. Incluir estos alimentos puede equilibrar las comidas típicas más grasosas de la temporada.
  5. Bebidas a base de té verde y guaraná: ayudan a aumentar la energía y la disposición, promoviendo un estado más activo. Son una gran opción frente al consumo de bebidas alcohólicas en exceso.

Asimismo, estas son las comidas que se aconseja moderar en las fiestas:

  1. Snack: papas fritas, snacks empaquetados y comidas con alto contenido de azúcar y grasa suelen tener aditivos que estimulan el consumo excesivo.
  2. Bebidas azucaradas y alcohólicas: aportan calorías “vacías” que pueden acumularse como grasa corporal. Además, el alcohol interfiere con el metabolismo de grasas y azúcares.
  3. Productos cárnicos: embutidos y salchichas contienen altos niveles de sodio y grasas saturadas, lo que aumenta el riesgo de hipertensión y enfermedades cardíacas.
  4. Dulces y postres refinados: galletas, tortas y otros postres suelen estar llenos de azúcares y grasas no saludables, contribuyendo al aumento de peso si se consumen en exceso.
  5. Frituras: los alimentos fritos contienen grandes cantidades de grasas poco saludables. El consumo de este tipo de alimentos puede afectar la digestión y promover la acumulación de grasa corporal.