En este hermoso lugar se puede adquirir desde una hoja de laurel, 25 gramos de arroz para sushi o hasta de lentejas rojas de Turquía.
Desde las mismas raíces de Barrio Escalante, una de sus personalidades y emprendedoras más emblemáticas regresa con un nuevo concepto.
Luego de ausentarse de nuestro país por algún tiempo, Mónica Mendoza nos presenta Santatere, recordándonos las bases históricas de este hermoso lugar y nos ofrece un viaje a esas pulperías del pasado costarricense con un despliegue de modernismo. Con su particular calor humano y su eterna sonrisa al recibirnos.
¿Qué le parece la oportunidad de comprar jabón por kilo para aseo personal, plantas comestibles en macetas, como culantro, albahaca, orégano, galletas por unidad, condimentos en frasquitos tipo ensayos de laboratorio, y solamente lo que necesita en medidas de 25 gramos en adelante?
Esta propuesta se puede encontrar en el mercadito local Santatere, ubicado a la par de Intensa en Barrio Escalante, un emprendimiento familiar, de consumo natural, sostenible, reutilizable.
Santatere nace para dar valor agregado a todas las compras, no solo de alimentos, o de productos orgánicos, sino de aseo personal y con chocolatería, repostería gourmet y productos dulces de tradición costarricense.
Más de 130 tipos de productos a granel se pueden encontrar en el lugar, en venta de 25 gramos en adelante, ya sea solamente para comprar para una cena o almacenar en casa.
La propuesta ofrece desde el arroz tradicional, hasta el arroz especial para elaborar sushi, salvaje o para risotto, variedad de frijoles, garbanzos y hasta lentejas rojas de Turquía, especias nacionales o importadas de la india, saborizantes, sustitutos, ablandadores, semillas mixtas, y productos para la dieta keto, como harinas de almendras, edulcorantes, aceites; huevos de pastoreo, café de diferentes zonas del país, quesos artesanales de Zarcero y hasta salsas, chileras y exquisitas sales con condimentos de Nicoya.
La variedad es amplia, con mayonesas caseras, veganas, vinagres, miel de abeja pura, kombuchas, jugos cero azúcares, mermeladas, y hasta un yogurt griego casero, chocolatería elaborada en casa con Stevia, rellenos de fresa, naranja, almendras, o en barras de chocolate blanco u oscuro.
Santatere tiene un menú amplio de probióticos, y productos fermentados, como la kombucha y el kéfir, además de repostería y dulces de antaño como gatos, rosquillas, panes de queso, borrachos, cajetas y melcochas, difíciles de conseguir hoy en día y que nos evocan a nuestra infancia tras cada mordida.
En productos de aseo personal tienen una zona exclusiva de jabones para platos o de aseo personal de leche de cabra, cepillos de dientes de bambú, toallas sanitarias reutilizables, bloqueador solar natural o bolsas de tela.
Apenas comienzan pero ya tienen planes de expansión a corto plazo, van a introducir vinos orgánicos y tradicionales, así como cervezas nacionales, un menú de desayunos y sándwich diferenciados, elaborados por ejemplo con costilla o pierna de cerdo, vegetarianos y veganos, con productos de los proveedores, “ queremos hacer recetas por ejemplo con la berenjena o mayonesa envasada y casera, para que así los clientes puedan llevarse a casa los ingredientes que más les gusten” comentó Sara Rendón, socia propietaria del lugar.
Santatere trabaja en alianza con cooperativas de productores nacionales para lograr ofrecer la variedad de granos lo más natural posible, además están creando un sitio web con carrito de compras.
El lugar dispone de una zona para tomar café y consumir sus productos. El horario es de lunes a domingo de 8:00 am a 8:00 pm, cuentan con parqueo, para más información puede llamar al 8613-3333.