El país tiene una producción que ronda los 1.144 millones de litros al año y que continúa al alza, según datos de la Cámara Nacional de Productores de Leche.
El aumento en la variedad y orígenes de los productos lácteos, así como una mayor demanda de quesos madurados impulsa el crecimiento de las exportaciones que pasaron de $119 millones en 2012 a $155,2 millones en el 2017, es decir un 30% más en los últimos cinco años.
Para poder comparar los volúmenes de productos lácteos comercializados, se estima la cantidad de leche equivalente de cada uno de ellos, es decir, la cantidad de leche que fue necesaria utilizar para fabricar cada uno de ellos. En 2017, se exportaron el equivalente de 231 mil toneladas métricas de leche fluida y se importaron el equivalente de 139 mil toneladas métricas, lo que representa un saldo comercial favorable de 93 mil toneladas métricas de leche fluida equivalente.
Este desarrollo de la industria es posible gracias a la labor de 27.947 productores de leche, de los cuales 12.974 son especializados y 14.973 de doble propósito (carne y leche). Además, existen en el país 2.348 fincas de ganado caprino, 1.792 de ganado ovino y 4.380 de ganado bufalino, que se incorporan cada día con más fuerza al mercado para un total de 36.467 productores.
“Hemos sido vehementes con el sector productor en la importancia de promover el cumplimiento de la reglamentación vigente, de propiciar la correcta denominación de los lácteos desde la etapa de registro y asegurar una mejor fiscalización en el mercado en beneficio de los consumidores” indicó Álvaro Coto, Presidente de la Cámara Nacional de Productores de Leche.