La resiliencia y el bienestar son fundamentales
La salud es crucial, adaptarnos a las circunstancias y cuidarnos son acciones cruciales en la vida cotidiana, ya que se necesita ser flexible y resiliente para mantener un equilibrio físico, mental y emocional óptimo.
Fernando Mena, director de la Clínica de Psicología de la Universidad Latina de Costa Rica, expresó que es importante seguir pautas respaldadas por la evidencia científica para mejorar la salud mental y emocional.
Lo primero es identificar las emociones, ponerles nombre, reconocerlas y aceptarlas para procesarlas de manera efectiva.
Las dos siguientes áreas clave se refieren a la práctica de la atención plena (Mindfulness) y el desarrollo de relaciones interpersonales saludables. Estas prácticas ayudan a vivir en el presente, aumentando la capacidad para manejar el estrés, la ansiedad y fortaleciendo conexiones con los demás.
Después están los hábitos saludables, como las suficientes horas de sueño, una alimentación adecuada, transformar pensamientos negativos en positivos, promoviendo una perspectiva más optimista.
La última etapa es la resiliencia, la capacidad de superar situaciones adversas. Esta habilidad está intrínsecamente ligada a la adopción de pensamientos positivos.
“Se debe hacer un esfuerzo de cuidarnos a nosotros mismos y a los demás, promoviendo un mundo donde la salud mental y emocional sea una prioridad y donde cada individuo pueda encontrar la serenidad y la felicidad en su camino hacia la fortaleza interior”, indicó Mena.
