Así lo afirma el Colegio de Profesionales en Nutrición (CPN), que aprovecha el mes patrio para promover el consumo de alimentos tradicionales en el país.
Aunque de acuerdo con investigaciones, en Costa Rica se ha definido al tacaco como el único producto endémico, es decir, que se consumía antes de la llegada de los europeos en lo que hoy es nuestro territorio; existe una gran cantidad de alimentos criollos que llegaron a “naturalizarse” lo suficiente como para poderse reproducir de una muy buena calidad en el país y llegaron a formar parte de lo cotidiano costarricense.
“Los alimentos criollos aportan nutrientes esenciales y muchos de ellos contienen una cantidad importante de sustancias antioxidantes. Al ser de origen local, y no requerir largo tiempo de transporte ni traslados, ni ser sometidos a refrigeración para traslado, se pueden adquirir con mayor frescura y por tanto con un mayor contenido de nutrientes que otros alimentos menos frescos”, comentaron Marcela Dumani, Patricia Sedó y Romano González, voceros del CPN.
Tomando en cuenta las costumbres alimentarias de la población tica, existe una tradición, que se debe mantener y fortalecer, en cuanto al consumo de alimentos criollos, con preparaciones que resaltan por la combinación de “olores” y “sabores”.
Se recomienda incluir alimentos autóctonos en todos los tiempos de comida, pues su amplia variedad nos ofrece frutas, vegetales, raíces y tubérculos, cereales, leguminosas, especias y olores, bebidas, endulzantes, permitiéndonos la posibilidad de una gran versatilidad en su uso. A partir de ellos podemos preparar platillos tradicionales, pero también hacer volar la imaginación y generar ricas combinaciones que permitan innovar en nuestras cocinas y nuestros paladares.