Una novedosa iniciativa de la empresa nacional Distribuidora Café de Montaña denominada Sello Kapiwo ofrece un acompañamiento a familias productoras de café de diversas zonas del país para estimularlos en obtener las mejores cosechas, que luego son parte de este tueste gourmet de la compañía.
“En la primera etapa la idea surgió con 20 familias de productores e irá creciendo conforme el consumidor final prefiera estas calidades premium de nuestro grano de oro. Se trata de estudiar en diferentes comunidades el liderazgo de cada grupo familiar, su trayectoria en la actividad y finalmente su historia de esfuerzo de forma que sirva de enseñanza y ejemplo a otros”, expresó José Manuel Hernando, gerente general.
Una vez elegida la familia cafetalera, Kapiwo aporta un apoyo económico y el mejor esfuerzo de encadenamiento para que la misma se beneficie con programas de capacitación y se le brinde, por medio de las diferentes unidades de negocio de la compañía, el apoyo necesario hasta que esos granos de oro se transformen en el sabor de este café de altura que está a la venta en los diferentes supermercados.
“Parte de nuestra estrategia de trazabilidad y sostenibilidad empresarial está enfocada en el compromiso con los productores que nos brindan los mejores granos como materia prima, de ahí nace el sello Kapiwo como un estímulo adicional en cada fanega que nos entregan”, agrega Hernando. Incentivar la actividad cafetalera en zonas productoras de alta calidad y fomentar el apoyo al sector, permitiendo que en forma directa o indirecta se beneficien cientos de familias ticas, es también parte importante y muy valiosa del compromiso de este proyecto.
Al deleitar el paladar con una taza de Kapiwo el consumidor sabe que colabora con la iniciativa, tal es el caso de don Rodolfo Ureña Camacho, productor de la zona de San Marcos de Tarrazú, donde el café se convirtió hace años en una tradición familiar. Su finca, que le da trabajo a 35 personas en la recolección del grano, ha estado en manos de tres generaciones y forma parte de los lotes que marcan la diferencia en el resultado de la mezcla que ofrece Kapiwo.
Por otra parte, destaca la labor de Olman Matamoros, oriundo de Sarchí, quien desde sus 15 años tiene una estrecha relación con el café. Muy joven persiguió el sueño de tener sus propias plantaciones en la zona y actualmente es uno de los más reconocidos productores de Valverde Vega. Para seguir con la tradición, sus hijos se involucran desde la plantación hasta la taza, combinando esa pasión por el grano de oro con la siembra de árboles frutales. A sus 65 espera dejar un valioso legado para que luego sean sus nietos, quienes se dediquen a sembrar sueños en cada fanega.
Be the first to comment