Las “Casas Club” permiten fortalecer la resiliencia en niños en condición social vulnerable

Hay Casas Club en Siquirres, Cañas y Upala para apoyar a menores en riesgo social

Uno de cada tres niños o niñas costarricenses vive en hogares cuyos ingresos no cubren sus necesidades básicas, son pobres o pobreza extrema. La tendencia señala que la pobreza es un factor que eleva los factores de riesgo de la niñez como, por ejemplo, abusos de diversa índole, deserción escolar, maltrato, violencia e incluso afectación por desastres como inundaciones, sequías o deslizamientos.

Justamente en la niñez vulnerable es en la que se concentra el trabajo de las Casas Club de World Vision, las cuales, se ubican en Siquirres, Cañas y Upala.

El modelo de atención a la niñez efectuado por las Casas Club, busca generar un “oasis de bienestar con espacios para que la niñez juegue, aprenda, comparta y se exprese de manera segura. Allí no solo adquieren conocimientos útiles para su vida, sino que se les enseña a lidiar con su entorno, a pensar críticamente, a comunicarse de manera asertiva, a conocer sus derechos y a entablar relaciones saludables con sus pares”.

Las Casas Club actualmente atienden a un estimado de 500 menores de edad, esto es debido al aforo permitido por las regulaciones sanitarias frente al COVID-19; en temporada post pandémica se espera atender a una población de 1350 niños y niñas.

Las Casas Club, World Vision dependen principalmente de donativos de personas que creen y confían en la propuesta de abordaje para la población menor de edad. Las personas o empresas que deseen donar una contribución mensual, o bien, hacer aportes únicos no programados pueden acceder al enlace https://www.worldvision.cr/como-ser-parte

De acuerdo con expertos en la materia, como Muñiz y colaboradores, “el modelo de resiliencia indica que las fuerzas negativas, expresadas en términos de daño o riesgos encuentran un verdadero escudo protector que hará que dichas fuerzas no actúen linealmente, sino que atenúen los efectos negativos y en otras circunstancias las transformen en factor de superación de la situación adversa”.

Las Casas Club han desarrollado cuatro diferentes “espacios”, con propósitos distintos pero que en conjunto apoyan una formación integral de los menores de edad.

  • “Espacio ART” cuyas siglas hacen referencia a Arte, Recreación y Tecnología, en el cual, más que desarrollar conocimientos o habilidades artísticas se pretende que reciban una atención psico-social a través de un trabajo grupal que refuerza su autoestima y sus habilidades para desenvolverse de manera constructiva socialmente.
  • “Espacio tecnológico” en el cual adquieren habilidades prácticas.
  • “Espacio abierto”, por su parte, es un patio en el que pueden interactuar sanamente, de manera segura y en mayor libertad.
  • “Espacio seguro”, está destinado a la atención psicológica individualizada de niños y niñas que presentan casos de especiales por el nivel de riesgo mostrado.

Como explica Álvarez, “lo que nos enseña la vivencia es que fortalecer su resiliencia desde temprana edad les brinda las herramientas y habilidades personales para enfrentarse a su realidad con mayores capacidades, así también como aprender a detener la violencia porque son más conscientes de los instrumentos que les protegen; al mismo tiempo, les ayuda a perfilarse y tener más claro hacia dónde quieren enrumbarse en un futuro”.