El programa beneficia a agricultores, consumidores y estudiantes.
Puratos lanzó un programa desde el 2013 llamado “Cacao Trace” que impulsa y busca construir un futuro sostenible para el chocolate a través de un abastecimiento de cacao que resalte por su proceso de fermentación.
Y aunque la industria del chocolate relaciona la sostenibilidad con la productividad, este programa hace la diferencia al cumplir con esto por medio de la estandarización de procesos y mejora del sabor.
México, Costa de Marfil, Uganda, Filipinas, Papúa Nueva Guinea, Vietnam y Camerún son los países productores de cacao que la red de centros de postcosecha cubre. Y la directora de mercadeo para Centroamérica, Suramérica y el Caribe de Puratos, Evelyn González, mencionó: “Estamos invirtiendo en una red única de centros locales de postcosecha donde nuestros expertos en fermentación crean granos de cacao de calidad superior.”
Además, González añadió que: “Cuando se compra productos de este programa se está contribuyendo al suministro de chocolate a largo plazo, a la vez que se ayuda directamente a reducir los niveles de pobreza de los cultivadores. Por cada kilo de chocolate adquirido, Cacao-Trace paga un bono de chocolate de €0.10 que revierte en las comunidades cultivadoras. A hoy esto suma el equivalente a uno o dos meses extras de salario mínimo. De esta manera, ellos obtienen un valor más justo por el excelente chocolate que han contribuido a crear.”
Con esto, se destaca que el programa beneficia al consumidor y crea granos de cacao de una mayor calidad. También, los ingresos de los agricultores se ven impactados positivamente, a los estudiantes porque Cacao Trace ha logrado disminuir la deserción estudiantil y entre otros beneficios del programa, resalta la construcción de un hospital de maternidad y aulas en escuelas que no tienen los fondos económicos suficientes.
Edición: Sugeilyn Quirós