Silvia Rodríguez es una empresaria que no le teme a los retos, ella tenía en Ciudad Colón un hotel y una agencia de viajes, los operadores de Alemania le solicitaban que los turistas pasaran la última noche en San José, por lo que se vino a la capital a buscar un lugar donde abrir ese hotel y lo encontró en Barrio Escalante, ahí nació Luz de Luna.
Poco a poco el sitio se fue poblando de restaurantes, los vecinos se unieron y se acercaron para organizar el Paseo Gastronómico La Luz, sin embargo tenía espinita de montar un restaurante con comida costarricense, pero la auténtica, la de nuestros abuelos, la de nuestros hermanos indígenas.
En el camino conoció a Pablo Vázquez, chef, a él le encantó la idea y juntos se pusieron a investigar las recetas, la forma de cocinar, visitaron las reservas Maleku y Boruca y montaron el menú, aunque todavía les falta incorporar algunos platos, la oferta ha sido todo un éxito.
Vamos con el menú, el cual está dividido en cuatro partes: Cuarto Creciente son las entradas, entre ellos ceviche y paté de hígado; Luna Llena son los platos fuertes, aquí usted encontrará el casado, bistec encebollado que en realidad es lomito, Papillot Maleku: un pescado envuelto en hojas de plátano y servido con vegetales y maíz. También está el famoso arroz guacho con mariscos, las costillas de cerdo birreras marinadas con la cerveza artesanal Escalante son una verdadera delicia.
Cuarto menguante son las bocas, entre ellas patacones y salchipapas de pato que son papas con pato, y la luna de miel son los amados postres como el helado de café con leche, prestiño que viene con salsa de tapa de dulce y licor flameado, suspiro lunático con atol de naranja en el centro o los sapitos que son receta boruca: coco rayado, masa y tapa de dulce.
De esto y más nos habla el chef Pablo Vázquez:
De la finca a la mesa
Silvia Rodríguez creció en una finca, ella recuerda que para comer el pato su mamá lo ponía a cocinar desde el día antes porque su carne es muy dura, eso precisamente, la forma de cocinar, las recetas de la abuela, las de nuestros antepasados es lo que quiere rescatar en Luna Roja, por cierto de ahí nació el estofado.
Los ingredientes que usan son naturales, la carne viene certificada, todos los proveedores son costarricenses, no utilizan condimentos ni químicos, desean que los comensales sientan ese sabor del campo.
Como lo indicó Rodríguez, el concepto del restaurante es cocina costarricense moderna y eso se nota en la preparación y presentación de los platillos, donde cada detalle se cuida, ahí por ejemplo el casado se sirve sobre una hoja de plátano y en lugar de maduros Vázquez prepara un pastel de plátano, el pescado del Papillot se cocina por 15 minutos también en la hoja y el Ceviche al Momento, el pescado también se cocina al punto.
El lugar es bastante acogedor e iluminado, lleno de detalles, los precios van desde los ¢2500 a ¢11500, tienen plato ejecutivo de lunes a viernes de 11 am a 3:30 pm, además gran variedad de bebidas.
Ambiente distinto, sereno, deliciosa comida, exquisitos postres y atención cinco estrellas lo esperan en Luna Roja.
Dirección: Calle 33, avenidas 3 y 5 en Barrio Escalante, los puede buscar en Waze.
Horario: lunes a jueves de 11 am a 10 pm, viernes y sábados de 11 am a 11 pm y domingos de 11 am a 9 pm.
Teléfono: 22254-4919
Facebook: Luna Roja
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