La ingesta de fibra nos ayuda a mantener una buena digestión y contribuye a controlar y prevenir enfermedades cardiovasculares, cáncer de colon y diabetes tipo 2
La actualidad ha traído grandes cambios en los hábitos alimenticios de las personas, en algunos casos con consecuencias negativas: el sedentarismo, estrés y ritmo con que se desarrollan nuestros días han deteriorado nuestra salud. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha considera a la obesidad como la pandemia del siglo XXI, con víctimas mortales por más de 2.8 millones de personas.
La llegada de la Covid-19 generó que, en nuestras vidas, el sobrepeso y la obesidad tuvieran mayor prevalencia, debido a ser factores de riesgo para desarrollar una enfermedad grave por coronavirus.
El confinamiento del que fuimos objeto por meses debido a la pandemia por coronavirus no ha ayudado a contrarrestar estas tendencias. Miles de personas alrededor del mundo debieron de cambiar sus hábitos alimenticios y reducir la actividad física. Causando un aumento del sedentarismo, además de un considerable incremento en el consumo de calorías.
Al movemos menos y comer más, la quema de calorías se ve reducida. Pudiendo llegar a ocasionar algún cuadro de depresión o de ansiedad, aumentando así la ingesta de alimentos calóricos que nos proporcionan más placer, como las grasas y dulces.
El sobrepeso y la obesidad se pueden prevenir.
Uno de los grandes desafíos para la salud pública a nivel global es la prevención de la obesidad y el sobrepeso. En muchos de los casos, esta condición comienza desde la infancia o adolescencia: un niño obeso, será un adulto obeso. Se estima que un 25% de los niños y adolescentes en el mundo sufren este problema. Las causas van desde la falta de actividad física, alimentación inadecuada, genética, estilo de vida y algunas enfermedades o medicamentos administrados de forma periódica.
Mejorar este panorama en la mayoría de los casos está a nuestras manos y podemos lograrlo con estos simples pasos: una dieta equilibrada entre frutas, verduras, legumbres, pescado, pollo, frutos secos y cereales integrales ricos en fibra y la sana costumbre de establecer un horario regular para comer tres veces al día y dos meriendas, acompañado de una hidratación constantemente con agua natural y establecer límites en el consumo de alimentos ricos en grasas, sodio, sal y azúcares. Todo esto acompañado de actividad física frecuente es vital para mantenernos sanos, sin olvidar la importancia de una rutina de sueño saludable, así como dejar de fumar o ingerir bebidas alcohólicas.
La importancia del consumo de fibra.
El consumo de manera frecuente de fibra es beneficioso para nuestro organismo, el simple hábito de consumir de 20 a 30 g de fibra total (dietética y/o de suplementos) por día o 14 gr por 1,000 kcal ingeridas, lo que se traduce a una ingesta total de 25 gr de fibra para las mujeres y 38 gr para los hombres, permitirá una mejora notable en cuanto al bienestar de nuestra salud.
La fibra permite resistir el proceso de digestión en el tracto gastrointestinal y nos brinda varios beneficios para la salud, por ejemplo:
- Metabólicos (reduce el riesgo de desarrollar diabetes mellitus tipo 2, y optimiza el perfil de lípidos).
- Cardiovasculares (combate la inflamación crónica, disminuyendo el riesgo coronario).
- Efecto local intestinal (mantiene la integridad, función, movimiento y salud del intestino).
“Uno de los desafíos más relevantes de la actualidad es lograr un equilibrio entre alimentación y salud, sobre todo a partir de la pandemia, cuando pasamos a un mayor sedentarismo; de hecho hoy el 60% de la población mundial se ve afectada por este trastorno. Ante ello, alternativas naturales como Metamucil, se vuelven verdaderos aliados, ya que favorecen procesos naturales de limpieza para el organismo a partir de la fibra”, explica Rhina Álvarez, Directora de Comunicaciones de P&G para Centroamérica.
Metamucil es un producto elaborado de la cáscara de semilla de la planta llamada Psyllium Plántago. Es fibra soluble, con la capacidad de retener agua y formación de gel, además es un polisacárido totalmente natural altamente ramificado. Es una fuente de fibra 100% natural, que cubre los requerimientos diarios de ingesta de fibra que recomiendan los expertos permitiendo contrarrestar la inflamación crónica, lo que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares. La fibra de Metamucil, al ingresar al estómago en forma de gel, atrapa y ayuda a deshacerse de los desechos que el cuerpo no necesita.
El consumo regular de fibra es considerado como un tratamiento de primera línea en contra del estreñimiento, que mejora la frecuencia de los movimientos intestinales y la consistencia de las deposiciones. En bastantes casos, se ha logrado observar que el uso de fibra ha permitido a los pacientes discontinuar el tratamiento con otros laxantes.
Las fibras son muy seguras y tienen muy pocos efectos secundarios, son un laxante no irritante y actúa de forma suave y sin dolor.