La diabetes se ha convertido en una enfermedad de cuidado, en especial por ser uno de los factores de riesgo de la Covid-19
Rony Calderón, Gerente Médico de Diabetes de Sanofi en la Región Pacífico & Caribe comentó que es importante, y máxime en tiempos de pandemia, que la población se incline por una dieta saludable, por incrementar la actividad física regular, el mantenimiento de un peso corporal normal, evitar el consumo de tabaco, de azúcar y grasas saturadas, además de la constante y controlada medicación, así como someterse a los exámenes periódicos para detectar y tratar las complicaciones.
La diabetes es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no origina insulina suficiente o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce. La insulina es una hormona que regula el azúcar en la sangre. El efecto de la diabetes no controlada es la hiperglucemia (aumento del azúcar en la sangre) que, con el tiempo, daña gravemente muchos órganos y sistemas, especialmente los nervios y los vasos sanguíneos.
Hay dos tipos: la tipo 1 se caracteriza por una producción deficiente de insulina y requiere la administración diaria de esta hormona. Se desconoce aún su causa y no es prevenible con el conocimiento actual.
La diabetes de tipo 2 (también llamada no insulinodependiente o de inicio en la edad adulta) se debe a una utilización ineficaz de la insulina. Este tipo representa la mayoría de los casos mundiales y se debe en gran medida a un peso corporal excesivo y a la inactividad física asociada a factores genéticos.
“La diabetes es una enfermedad que se puede tratar o inclusive evitar tomando las medidas adecuadas, sin embargo nos preocupa que algunas personas que la sufren u otras que podrían desarrollarla, no están siguiendo las recomendaciones y están poniendo en riesgo su salud”, expresó Calderón.
Datos de la Federación Internacional de la Diabetes (FID) destacan que en el 2019 en el mundo habían 463 millones de personas con diabetes, sin embargo se estima que de no controlarse, al menos 578 millones de personas (10,2% de la población) tendrán diabetes para el año 2030 y para el 2045 se podría alcanzar los 700 millones (10,9%).