El Establo: comida y ambiente con sabor de hogar

 

*Fotografías Luis Gámez Camacho y Restaurante El Establo

 

Escondido en las montañas de Llano Grande de Cartago y con la vista de un paisaje espectacular, encontramos un restaurante que tiene unos platillos deliciosos, calor de hogar y atendido personalmente por sus propietarios, hablamos de El Establo.

Los esposos Evelyn Aguilar y Jesús González son los papás de la criatura, ellos nos atendieron y pasamos de entrevista a conversación entre amigos, nos contaron cómo con la ayuda de Dios y de sus familias lograron materializar ese sueño, pero esa historia la contaremos más adelante.

El Establo es típico, si usted es de las personas que disfruta de la comida sin importar las calorías, tiene una cita obligada en este lugar  que nos sorprendió.

Menú: arroz con pollo, cerdo, camarón y mariscos, acompañados de papas fritas y ensalada; sopas como la estrella de la casa que es la olla de carne, alcanza para dos personas porque es gigantesca, pero si usted es fiebre de esta delicia, apenitas, tome en cuenta que trae repollo; sopa del día, cubaces con pellejo de chancho, pozol.

Casaditos con bistek encebollado, chicharrón, costilla, ternero (sí, con lo que cuesta encontrarlo), pescado, fajitas de pollo, lengua en salsa, también hay uno vegetariano y otro vegano, por aquello de la dieta.

Bocas acompañadas con papas, ensalada y frijoles molidos que es necesario una orden extra porque son riquísimos: costilla, alitas, filet de pescado “Al Establo”, gallo de ternero (es obligatorio repetir), chifrijo y fajitas mixtas.

Ensalada, verduras al ajillo o al vapor, tortillas palmeada, chorreadas, tres platos surtidos que vienen con costilla o chicharrón, pescado, yuca, alitas, gallo de ternera, frijoles, papas, patacones, pico de gallo.

Refrescos en agua y en leche, gaseosas, café, aguadulce, chocolate caliente, cerveza, ron, whiskey, tequila y por ahí vimos una botella de vino.

Tienen surtido para dos, cuatro y ocho personas, este último es el extra grande, aunque en honor a la verdad, en el plato para dos comen tres.

Cuando las ganas sobran

Evelyn y Jesús abrieron el restaurante hace cuatro años, él era chofer de la ruta Llano Grande-Cartago, Evelyn trabajaba en una empresa de floricultura, González siempre tuvo la idea de tener un negocio propio, además de tener tiempo para la familia, eran casi 16 años detrás de un volante.

Como la propiedad donde tienen la casa es familiar, él agarró parte de una bodega que tenía su papá y ahí armó el restaurante, que al inicio solo vendía chifrijo y filet de pescado.

“El primer fin de semana no llegó nadie, la semana siguiente vinieron como 70 personas, no nos podíamos dejar caer, ya al mes eran filas de carros lo que teníamos afuera, mucho nos ayudó el boca a boca”, recordó Jesús.

Nunca faltan ángeles en el camino y como ya se ocupaba equipo, un señor les dio fiado una freidora y las mesas, al inicio usaban la cocina de la casa, la cual cuenta entre risas Evelyn que fundieron una nueva que la mamá de ella les regaló, la pobre ya no dio más.

La mamá de Jesús prestó ollas y una plantilla para hacer las tortillas, luego poco a poco agrandaron el local, se toparon con algunos problemas para conseguir la patente de licores cortesía de nuestra burocracia.

Pero gracias al trabajo en equipo, a la ayuda de Dios y al apoyo de familia y amigos, ya El Establo es un negocio en crecimiento, el cual tiene un menú con platos típicos de la zona, Evelyn está al frente de la cocina, Jesús se encarga de la parte administrativa, aunque también la hace de salonero, cajero y encargado de compras.

Entre los planes que tienen es hacer un horno de barro para las pizzas y para repostería.

Preguntamos de dónde nació el nombre del restaurante, nos contaron que el papá de Jesús quien llegó con el letrero y lo pegó: fin de la historia.

Los precios están entre los ¢800 y ¢4000, el surtido para dos ¢8 mil, grande ¢10 mil y extra grande ¢20 mil, el 10% lo cobran en la caja, aceptan tarjetas

Lleve abrigo por aquello del frío, zapatos cómodos y buen apetito porque las porciones son grandes, no se le olvide comprar el pancito para el café, ese también lo hacen ellos.

Ojo, se puede coordinar un desayuno y atienden grupos grandes ya sea de familiares o de turistas inclusive, usted quedará a la altura.

Ambiente cinco estrellas, una olla de carne para chuparse los dedos, los gallos de ternero que arrancan suspiros y unos frijoles molidos pero espectaculares, pero sobre todo calor de hogar lo esperan en El Establo.

Horario: lunes a jueves de 11 am a 8 pm, viernes a domingo de 11 am a 11 pm

Dirección: 1.5 km del centro de Llano Grande de Cartago, búsquelos en Waze como Restaurante El Establo Llano Grande

Teléfono: 8342-0642/5708-5699

Facebook: Restaurante El Establo Llano Grande